Noche psicodélica en el Metropólitan con Juan Son.
Fotografía: Jenni Mapache
Daban las 7:30 de la noche y el telonero salían puntual al escenario: Transgresor corruptor, el proyecto musical de Yamil Rezc ponía en sintonía a los que estábamos ya sentados en nuestros respectivos lugares dentro del teatro, con un conjunto de melodías y efectos de sonido se comenzaban a llenar las butacas, aunque no en su totalidad, ya que como es costumbre en los conciertos, los teloneros salen una hora diferente a la que dice el flyer, y en este caso, Juan nos sorprendió saltando al escenario a las 8:00 p.m.
Con esa típica túnica que ya es esencia de él, su cabello largo y esa sencillez que demostró desde el momento que salió a presentar a su telonero, Espiral fue la encargada de inaugurar el concierto ante un público que aún no había logrado llenar todo el recinto, la misma puntualidad de Juan provocó que muchos de los asistentes se perdieran las primeras canciones.
Aunque se presentaron algunas fallas en las proyecciones visuales en la parte trasera y con un juego de luces que acompañaban perfectamente cada interpretación Host of a Ghost, Cuervos y Nada fueron algunas de las canciones que hicieron vibrar a su público que si bien, no podía moverse de la manera que quisieran bailaron y cantaron desde sus lugares y no dejaban de gritar cada que Juan nombraba cada canción que empezaba a tocar, “ésta, a pesar de sonar triste, realidad tiene un significado más profundo…” nos contaba la historia de cada una, como la vivió y lo que sintió para poder inspirarse en la composición de éstas.
Fotografías: Jenni Mapache.
El concierto duró poco más de hora y media, acabando el show Juan se tomó fotos con las primeras 150 personas que adquirieron sus playeras y después el teatro quedo vacío después de haber dado una presentación que dejo felices a todos los que nos dimos cita en el coloso del centro de la ciudad, cumpliendo así con uno de los objetivos de este gran artista al que aún le queda un largo camino que recorrer. Texto: Saúl Enrique González