Evolución Tour llenó el Auditorio Nacional con Intocable
El 11 de marzo llegamos al Auditorio Nacional y ya desde fuera se lograba ver a bastante gente con su característico sombrero norteño, listos con sus cerveza para entrar al recinto y disfrutar de Intocable.
Minutos después de las 8 se apagan las luces y aparece en la pantalla un video de introducción a la noche que estabamos por tener, mencionando que nos encontramos en buenas manos.
Fotografía: Ocesa
La agrupación aparece entre gritos y aplausos del público, así mismo comienzan con "Eres mi droga" acompañados del coreo de un Auditorio Nacional totalmente lleno.
Canciones como Aire también se escuchan en el recinto para después realizar una pequeña pausa y que Ricky Muñoz nos mencionara que "tomaramos asiento como en misa", demostrando su simpatía característica y conexión con el público, pues también se tomó el tiempo de cantar "Happy Birthday" a la hija de uno de sus asistentes que emocionado le gritó que hoy era su cumpleaños.
La noche transcurrió e interpretaban canciones no tan recientes como "Tu soledad y la mia", aunque también algunas más nuevas como "Quedate" que estaban acompañadas de un karaoke en la pantalla.
La agrupación comentó que en 2011 se vuelven independientes pese a que todos en la industria mencionaban lo difícil que sería para ellos, sin embargo, decidieron no hacer caso y gracias a esta etapase volvió muy importante la siguiente canción llamada Prometí.
Acompañados de las voces y pasos en el público, escuchamos "Si me duele que duela" y "No me hablen de amor" un tema en el que colaboraron con Pepe Aguilar.
Llegó el momento mas esperado de la noche como mencionó Ricky, pues era el turno de las canciones clásicas, un anuncio muy emocionante para todos los asistentes e iniciando con canciones como "Enséñame a olvidar" y "Fuerte no soy", melodías coreadas por todos mientras bailaban en parejas o en su mismo lugar.
Terminaron (o eso creímos) con "Sueña" acompañado de unos visuales azules y brillantes que nos evocaban a lo que transmite la canción, acto seguido la banda se despidió retomando el temprano chiste de las misas con la frase "podemos ir en paz, este concierto ha terminado".
Fotografía: Ocesa
Sin embargo la audiencia no dejaba de gritar tras 2hrs de concierto y la agrupación regresó para interpretar algunos éxitos más como "Es tan bello", "En la oscuridad" y obviamente no podía faltar "Soñador eterno".
Entre sombreros, chelas y sonrisas salieron del Auditorio los cientos de asistentes que felices disfrutaron de una noche norteña que seguramente no olvidaran.
Fotografía: Ocesa
