Una noche de post-punk bajo los puentes: El último vecino

La agrupación catalana de post-punk liderada por Gérard Alegre aterrizó en México como la cereza del pastel en la gira de su más reciente disco “Juro y prometo” el pasado jueves 5 de mayo en el Bajo Circuito de la colonia Condesa.

Aunque la hora de entrada al evento era a las 8 de la noche, la gente comenzó a hacer fila desde las 7, hora en la que el staff del lugar se preparaba para el concierto mientras los músicos comenzaban a llegar. En ese momento todo parecía ser solo la espera antes del concierto, cuando Gérard Alegre salió a las puertas del recinto a saludar a sus fans más puntuales y tomarse unas fotos con ellos.

Una vez con el evento en marcha, la primer banda en salir y la encargada en comenzar a animar al público fue, Adiós Cometa, originario de San José de Costa Rica y posteriormente tocaría San Charbel, banda de Ciudad Juárez, Chihuahua, que igualmente contribuyeron con su música para encender más los ánimos del público chilango, quienes respondieron con aplausos y cantando sus canciones.

Luego de que los teloneros cumplieran prendiendo al público, El Último Vecino saltó al escenario, con la energía del torero que sale al ruedo conectaron con su gente desde los primeros acordes y el bajo característico del post-punk.

Tras 4 años de ausencia y sumando la pandemia por la que atraviesa el mundo, la música de la banda catalana volvió y el público del Bajo Circuito hizo valer la espera brindando, bailando y disfrutando con cada canción.

Para El Último Vecino, pareció ser una noche mágica con su público mexicano y era claro en el sentimiento de Gérard Alegre al interpretar los himnos de la banda y los temas del disco “Juro y prometo”.

Y con un sold out en la capital azteca, se despide uno de los referentes más grandes del post-punk español, cerrando con una gran noche y un público entregado.

Nota y fotos: Pablo M.