YO NO CIERRO LOS OJOS: LA CONMEMORACIÓN DE UNA LUCHA CONSTANTE #8M
La violencia es un acto contra el amor y la libertad, es traspasar los límites del otro, invadirlo, agredirlo, por eso es significante reconocer las conductas violentas de sí mismos y hacia otros, con la finalidad de hacer surgir a la consciencia que busca la sanación del símbolo.
8 de marzo día Internacional de la Mujer que representa la conmemoración de una lucha inagotable por la equidad, por la igualdad y por la integridad del cuerpo, del alma, del amor propio.
Esta campaña para evitar no solo la normalización de la violencia contra la mujer, si no en cualquiera de sus modalidades, nace a raíz de la búsqueda por modificar los patrones de conducta que determinan la manera en cómo interactuamos en nuestras esferas y como llevamos las relaciones interpersonales que formamos desde el primer contacto con nuestro entorno, es decir desde niños; Tiaré Scanda, durante la conferencia de prensa afirma que “los fundamentos de estima son en la infancia”, de tal manera que la manifestación de masculinidad y feminidad, se construyen con otra perspectiva de género.
Y tú? Es la pregunta que mantiene esta campaña, ya que es la voz colectiva para el reconocimiento en las masas, acerca de la valentía que hay que construir para no ignorar los eventos en dónde además de generar violencia, la vuelves parte de tus conductas habituales y terminas por cerrar los ojos ante la expresión de la agresión.
Actores mexicanos, músicos, influencers, reporteros y demás buscan generar empatía en la colectividad, para inculcar a la sociedad la identificación de la toxicidad de sus actos y así poder resignificar la indiferencia por acción.
Reconocer y trabajar la propia violencia en un proceso incesante, que requiere de valor y aprendizaje para saber escuchar la voz interna, que permite abrir los ojos e iniciar un cambio no superficial si no duradero.
“Nadie puede dar nada auténtico, si no lo ha buscado en sí mismo”, confianza, libertad, amor, cariño, equilibrio, calma, igualdad….
Fotos y texto: Lunámbula Volta.
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